La economía colombiana tendrá un desempeño moderado pero estable en los próximos dos años, según el más reciente informe de perspectivas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), divulgado este martes 2 de diciembre. El organismo elevó sus pronósticos y ahora estima un crecimiento de 2,8% para 2025 y 2026, y de 2,9% para 2027, aunque advierte que el panorama está marcado por riesgos significativos.

La OCDE revisó en 0,3 puntos su proyección de crecimiento para 2025 (desde 2,5% en su informe previo del 3 de junio) y en 0,2 puntos la estimación para 2026, que antes estaba en 2,6%. Según el estudio, la economía “crecerá a un ritmo moderado, cercano a su potencial”, tras el avance interanual de 3,4% registrado en el tercer trimestre de 2025.

El organismo, sin embargo, advierte que “los riesgos abundan”, especialmente por la incertidumbre global, los cambios arancelarios en Estados Unidos —destino del 28% de las exportaciones del país— y las limitaciones internas del aparato productivo.

Aunque el consumo privado se mantendrá dinámico, la OCDE señala que la recuperación de la inversión seguirá siendo parcial y permanecerá por debajo de los niveles prepandemia, cuando el país alcanzaba tasas del 21–22% del PIB. El bajo desempeño de la construcción, la incertidumbre regulatoria y la debilidad de algunos sectores continúan frenando la formación de capital.

El sector externo también aportaría menos al crecimiento. Las exportaciones petroleras y mineras enfrentan restricciones de producción interna, aunque un mayor precio del petróleo podría generar alivios en ingresos fiscales y en la balanza comercial.

Inflación persistente y déficit fiscal

La inflación volvió a subir y llegó al 5,5% en octubre, encadenando cinco meses consecutivos al alza. Aunque la OCDE prevé que comenzará a descender, estima que no regresará al rango meta del 3% antes de 2027. En política monetaria, proyecta que la tasa de interés se mantendrá estable en 9,25% por varios meses y que cerrará 2027 en 6,5%.

El mercado laboral, por su parte, muestra resiliencia. La tasa de desempleo se ha mantenido en 9% o menos desde marzo.

El déficit fiscal, que cerró 2024 en 6,7% del PIB, aumentaría a 7,1% en 2025 antes de caer a 6,2% en 2026 y 4,9% en 2027. La OCDE advierte que seguirá “elevado” y que existe un riesgo significativo de desvíos, debido a ingresos inciertos, recortes de gasto aún no ejecutados y mayor exposición cambiaria tras recientes operaciones de manejo de deuda.

El organismo recomienda una estrategia de consolidación fiscal “más ambiciosa”, que incluya una reforma tributaria integral y una reducción de las rigideces del presupuesto, con el fin de estabilizar la deuda y recuperar la confianza de los inversionistas.