En medio de la incertidumbre fiscal, el Ministerio de Hacienda confirma que ningún producto de la canasta básica familiar tendrá IVA. Este anuncio calma las especulaciones y ofrece un alivio tangible a los hogares. El Gobierno avanza en su plan de recaudar $26,3 billones ampliando la base tributaria. Esta medida busca un delicado equilibrio entre proteger a los ciudadanos y estabilizar las finanzas públicas.
La decisión de mantener el IVA en 0% para productos como el arroz, la papa y el pan es una jugada estratégica. En un entorno de alta inflación, el Gobierno busca apaciguar a la opinión pública y mitigar el impacto en los segmentos más vulnerables. La reforma, la tercera de la actual administración, se financiará con nuevos impuestos a bienes considerados «nocivos» como el alcohol y el tabaco.
Este enfoque tiene un doble propósito, obtener los recursos necesarios para el presupuesto de 2026 y alinear la política fiscal con objetivos de salud pública. Sin embargo, analistas advierten sobre los posibles efectos colaterales, como una contracción del consumo interno y una mayor presión inflacionaria.

La reforma tributaria está directamente ligada a la discusión del Presupuesto General de la Nación (PGN) de 2026. El Gobierno necesita los $26,3 billones de la reforma para cubrir el déficit proyectado. La oposición ha calificado el presupuesto de «inflado», generando una confrontación política.
Expertos del Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf) señalan una brecha de casi $39,5 billones, que incluye la insuficiencia de recaudo y la dependencia de la reforma. La advertencia del ministro de Hacienda sobre la posibilidad de decretar el presupuesto subraya la urgencia de la situación y el riesgo de una mayor polarización.
Impacto en el ecosistema empresarial
La exención de IVA a los alimentos beneficia a los hogares y contribuye a la estabilidad del consumo masivo. Sin embargo, la ampliación del gravamen a productos como el tabaco y los licores genera inquietud en sectores específicos. Este aumento de costos podría llevar a una contracción de la demanda y, en algunos casos, al crecimiento de los mercados ilegales.

Para las Pymes, el panorama es complejo. Aunque se benefician de la estabilidad en la demanda de alimentos, cualquier impacto en la cadena productiva podría tener un efecto dominó. La percepción de un aumento en la carga fiscal influye en las decisiones de inversión y expansión.
Perspectivas y proyecciones
La propuesta de reforma es una apuesta arriesgada que busca la estabilidad fiscal y la financiación de programas sociales. Las próximas semanas serán cruciales. La votación del PGN el 15 de septiembre será un termómetro del ambiente político. La capacidad del Gobierno para generar certidumbre será determinante para mantener la confianza de los inversionistas.
La confirmación de que la canasta familiar no tendrá IVA es una buena noticia, pero es solo una parte de un rompecabezas económico complejo. La pregunta es si el Gobierno logrará el equilibrio entre la necesidad de recaudar y el imperativo de no asfixiar la economía real.

