Ecopetrol, la empresa más grande de Colombia, presenta hoy sus resultados del segundo trimestre de 2025 con proyecciones a la baja, a pesar de haber logrado su mayor nivel de producción en la última década.

La compañía estima que su utilidad neta se ubicará entre $1,8 billones y $3 billones, lo que representa una disminución de entre el 46,6% y el 11% en comparación con el mismo período del año anterior, cuando las ganancias superaron los $3,37 billones.

Según la firma comisionista Casa de Bolsa, la utilidad neta de la petrolera podría situarse alrededor de los $2,2 billones, lo que significaría una caída del 34,7% frente al segundo trimestre de 2024. Este resultado sería el peor de la compañía desde el cuarto trimestre de 2020.

La caída en las ganancias se atribuye a dos factores externos principales, la disminución del precio internacional del petróleo y la apreciación del peso colombiano frente al dólar. En el periodo analizado, el precio del crudo Brent bajó un 19,6% anual en dólares y la canasta de crudo de Ecopetrol se redujo en un 14,3%, impactando directamente los ingresos de la compañía.

Desempeño operativo y proyecciones futuras

A pesar de la caída en la rentabilidad, Ecopetrol reportó un sólido desempeño operativo. El presidente de la empresa, Ricardo Roa Barragán, anunció que se alcanzó la producción más alta en 10 años, con un volumen estimado entre 745.000 y 755.000 barriles de petróleo equivalente por día. La producción en la cuenca del Permian, en Estados Unidos, ha sido clave para sostener las cifras consolidadas del grupo.

Además de la utilidad neta, las proyecciones para el EBITDA trimestral se ubican entre $10 y $13 billones, una reducción significativa frente a 2024. Los ingresos totales se situarían entre $27 y $30 billones. Por otro lado, Ecopetrol prevé tener en su caja disponible entre $13 y $14 billones y reducir su cuenta por cobrar al Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles (FEPC) a un rango de $2 a $3 billones.

La empresa reconoce que sus resultados continuarán sujetos a la volatilidad del precio del crudo y la tasa de cambio. El principal reto para la administración de Ricardo Roa será aumentar la eficiencia y generar valor para los accionistas, en un entorno global que se prevé menos favorable para el petróleo en los próximos años.