El índice de precios de los alimentos a nivel mundial experimentó un aumento del 0,5% en junio respecto a mayo, según informó este viernes la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Este incremento se debió principalmente al encarecimiento de los productos lácteos, la carne y los aceites vegetales. El indicador, que monitorea los precios internacionales, promedió 128 puntos en junio, lo que representa un 5,8% más que en el mismo mes del 2024.
La FAO explicó que las caídas en los precios de cereales y azúcar fueron compensadas por los aumentos en otras categorías. Esta dinámica del mercado global mostró una compleja interacción entre la abundancia de algunos cultivos y las presiones alcistas sobre otros productos esenciales.

En el segmento de los cereales, el precio disminuyó un 1,5% en junio. Esta caída se debió a una baja por segundo mes consecutivo en el precio del maíz, gracias a los abundantes suministros de Argentina y Brasil. También bajaron los precios del sorgo, la cebada y el arroz. Sin embargo, los precios del trigo aumentaron debido a preocupaciones climáticas en regiones clave de la Unión Europea, la Federación Rusa y Estados Unidos.
Los aceites vegetales subieron un 2,3% en junio, liderados por el aceite de palma, que creció casi un 5%, así como por los aceites de soja y colza. Por su parte, el precio de la carne aumentó un 2,1%, alcanzando un nuevo máximo histórico, con alzas en la carne bovina, porcina y ovina. La carne de ave, en contraste, continuó disminuyendo.

El Índice de Precios de Productos Lácteos de la FAO subió un 0,5% en junio. Los precios de la mantequilla llegaron a un nuevo máximo histórico debido a suministros ajustados y una fuerte demanda. El queso también subió por tercer mes consecutivo. En contraste, el azúcar cayó un 5,2%, marcando su cuarto mes consecutivo de descenso y alcanzando su nivel más bajo desde abril de 2021.
Además, la FAO revisó al alza su previsión de producción mundial de cereales para 2025, proyectando un récord histórico de 2.925 millones de toneladas, un 2,3% más que en 2024. Se espera que la producción global de arroz en 2025/26 alcance un máximo de 555,6 millones de toneladas, lo que podría contribuir a estabilizar los precios de estos granos en el futuro.
