El puerto de Buenaventura, que moviliza el 44% de la carga contenerizada de Colombia, enfrenta una crisis logística que amenaza con paralizar el comercio exterior, según la Federación Colombiana de Transportadores de Carga por Carretera (Colfecar).
La acumulación de contenedores vacíos, causada por la incapacidad de las líneas navieras para evacuarlos, ha generado demoras de hasta seis días en la devolución de contenedores, frente a las cuatro horas habituales en 2023. Esta situación, agravada en 2025, dispara sobrecostos de US$150 diarios por contenedor, equivalentes a pérdidas de $60.000 millones diarios para el sector, según estimaciones del gremio.
La falta de coordinación entre navieras, terminales portuarias y patios externos ha convertido a los camiones en bodegas improvisadas, imposibilitando la carga de mercancías de importación bajo modalidades como Tránsito Aduanero (DTA).
“No hay instrucciones claras sobre dónde ni cómo devolver contenedores”, señaló Colfecar, destacando que los transportadores enfrentan sanciones económicas injustas por demoras fuera de su control. Esta desarticulación ha llevado a bloqueos en accesos a terminales, afectando a conductores cuyos ingresos diarios dependen de cada viaje completado. El impacto trasciende el sector logístico.
Buenaventura, clave para el 40% de las exportaciones no minero-energéticas como café y azúcar, ve comprometida la competitividad nacional en un contexto global donde los fletes marítimos han subido un 91% desde 2023, según el World Container Index. Colfecar urge al Gobierno Nacional crear una mesa interinstitucional con el Ministerio de Transporte, la DIAN, la Superintendencia de Transporte, navieras y terminales para implementar soluciones como operar patios 24/7 y suspender moras por demoras una vez el vehículo ingresa al punto de enturnamiento.
La crisis, que pone en riesgo el sustento de miles de familias y la cadena de abastecimiento, exige liderazgo técnico para evitar un colapso mayor. Mientras Colombia busca mantener su posición en el comercio global, la resolución de este problema será determinante para la economía nacional. La situación en Buenaventura sigue sin un cronograma claro de solución.
Revista COP 