El sector agropecuario lideró el crecimiento económico de Colombia en el primer trimestre de 2025, al registrar una expansión de 7,1% frente al mismo periodo de 2024, superando el aumento del PIB nacional, que alcanzó 2,7%, según el Dane.
Este desempeño, 4,4 puntos porcentuales por encima del promedio económico, consolida al agro como un motor clave de la recuperación, impulsado por subsectores como el café (31,3%), la pesca y acuicultura (18,2%), la silvicultura (11,4%) y la ganadería (8,9%).
Productos estratégicos mostraron un dinamismo notable: el cacao en grano creció 33,3%, el café pergamino 32,9% y la leche cruda 12,1%. Ningún subsector agropecuario reportó caídas, reflejando una tendencia de fortalecimiento. Comparado con el primer trimestre de 2024, cuando el agro creció 4,3%, el avance de 2025 evidencia una aceleración de 2,8 puntos porcentuales, apoyada en mayores cosechas y precios internacionales favorables, especialmente en el café.
Desempeño sectorial y contexto económico
La ministra de Agricultura, Martha Carvajalino, atribuyó estos resultados a las políticas de reactivación rural, destacando la necesidad de diversificar mercados y fortalecer la acuicultura. “El aumento en las cosechas del café y los precios internacionales fueron determinantes”, afirmó. El sector también se benefició de un entorno macroeconómico más estable, con una reducción del 30% en el índice de volatilidad VIX y un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China que alivia tensiones globales, según el boletín de Itaú.
A nivel nacional, el comercio y el entretenimiento complementaron el dinamismo, aunque la minería y la construcción siguieron rezagadas. Carolina Monzón, gerente de Investigaciones Económicas de Itaú, señaló que el crecimiento del PIB, superior a las expectativas, se alinea con alzas en producción industrial y ventas minoristas, favorecidas por más días hábiles en marzo. El peso colombiano se fortaleció, y el dólar se estabilizó entre $4.180 y $4.300.
El robusto desempeño del agro plantea oportunidades para consolidar su rol en la economía, pero requiere sostener la inversión en infraestructura y políticas de adaptación climática. El foco en diversificación y mercados externos será clave para mantener esta trayectoria.
Revista COP 