La informalidad laboral en Colombia alcanzó el 56,8% en el trimestre diciembre 2024 – febrero 2025, un aumento de 0,5 puntos porcentuales frente al año anterior, según el DANE. Más de 13 millones de trabajadores carecen de seguridad social, con la región Caribe y las microempresas como principales focos de esta problemática, lo que plantea retos urgentes para el mercado laboral.
De los 23,3 millones de ocupados en el país, 13,2 millones trabajan en condiciones informales, según el informe del DANE. Esto representa un incremento de 3,45 millones de trabajadores informales respecto a febrero de 2024, un 35,16% más. La falta de afiliación a salud y pensiones deja a esta población vulnerable, sin protección ante riesgos laborales ni perspectivas de un retiro digno.

La región Caribe lidera las tasas de informalidad. Sincelejo registra un alarmante 68,2%, seguida por Valledupar (65,3%) y Riohacha (64,7%). Barranquilla, con 54,4%, tiene cerca de 495.000 trabajadores informales de un total de 909.000 ocupados. En contraste, Bogotá (37,1%), Medellín (39,6%) y Manizales (34,7%) muestran niveles más bajos, reflejando mejores condiciones de empleo formal en estas ciudades.
Microempresas, epicentro de la informalidad
El informe destaca que las microempresas concentran la mayor proporción de informalidad. De los 14,7 millones de trabajadores en este segmento, 13,1 millones no están afiliados a seguridad social. En cambio, las grandes empresas, con 4,7 millones de empleados, reportan solo 146.000 trabajadores informales. Las pequeñas y medianas empresas, con 2,2 y 1,5 millones de ocupados respectivamente, también muestran niveles significativos de informalidad, aunque menores.
Estos datos evidencian las dificultades de las mipymes para asumir costos laborales, como cotizaciones al sistema de seguridad social, en un contexto de bajos ingresos y alta competencia. “La informalidad en microempresas refleja barreras estructurales que requieren soluciones específicas”, señaló un analista del DANE en el informe.

Por género, los hombres predominan en la informalidad con 8 millones de casos frente a 5,2 millones de mujeres, de un total de 13,7 y 9,6 millones de ocupados respectivamente. Aunque la brecha numérica es notable, la informalidad afecta significativamente a ambos grupos, limitando el acceso a derechos laborales.
