El Gobierno Nacional anunció que en abril abonará $400.000 millones para cubrir parte de las deudas acumuladas por subsidios de energía destinados a los estratos más bajos, un paso que, aunque significativo, no resuelve el problema de fondo. Así lo confirmó el ministro de Hacienda, Germán Ávila, durante el consejo de ministros del lunes 7 de abril de 2025, en respuesta a las crecientes críticas de la Asociación Colombiana de Distribuidores de Energía Eléctrica (Asocodis) por el incumplimiento de acuerdos previos.
Ávila reconoció que este pago no cubre la totalidad de la deuda, estimada por Asocodis en $7,6 billones a marzo de 2025, de los cuales $2,8 billones corresponden a subsidios impagos. “Hemos avanzado con $923.000 millones girados en el primer trimestre, y este abono de abril refleja nuestro esfuerzo por atender estos compromisos”, afirmó el ministro. Sin embargo, la cifra contrasta con las expectativas del sector, que reclama una solución estructural para evitar un colapso financiero.
El presidente de Asocodis, José Camilo Manzur, había denunciado en W Radio que el Gobierno incumplió un acuerdo de febrero que prometía $1 billón escalonado: $200.000 millones en enero, $350.000 millones en febrero, $250.000 millones en marzo y $200.000 millones en abril. “Solo recibimos $60.000 millones en marzo, muy lejos de lo pactado”, señaló Manzur, evidenciando la brecha entre las promesas y la ejecución.
Por su parte, el presidente Gustavo Petro atribuyó los retrasos al hundimiento de la ley de financiamiento en el Congreso y a decisiones internas de priorizar recursos hacia concesionarias viales. “No se han pagado los subsidios porque se destinó dinero a otros sectores sin evaluar su cumplimiento”, explicó en el consejo de ministros, apuntando a una tensión presupuestal que afecta directamente a los hogares de estratos 1, 2 y 3.
El anuncio del abono llega en un contexto crítico para el sector energético colombiano. Las empresas distribuidoras, que financian los subsidios a la espera de reembolsos estatales, enfrentan una crisis de liquidez que amenaza la continuidad del servicio. Según datos históricos del Ministerio de Minas y Energía, en 2024 el costo de los subsidios eléctricos superó los $4 billones, y la falta de apropiación suficiente en el Presupuesto General de la Nación 2025 agrava el panorama.
Ávila adelantó que el próximo lunes se reunirá con representantes de las empresas afectadas para explorar soluciones a las de18e debts. Este esfuerzo conjunto busca no solo saldar las deudas pendientes, sino también garantizar la sostenibilidad del sector energético a mediano plazo. Mientras tanto, el flujo mensual de subsidios sigue creciendo en $300.000-$350.000 millones, lo que sugiere que la deuda podría superar los $3 billones al cierre de abril, incluso con el nuevo abono.
Revista COP 